Contrario a lo que describen los historiadores, las verdaderas crónicas, las que son testimonio fiel de su tiempo, no aparecen compiladas en ningún tomo de un voluminoso libro de Historia. Las grandes verdades de una época las encierra en su extraña síntesis un gran chiste. Exactamente eso es SABADAZO. El suceso humorístico de fin e inicio de siglo.

Por derecho propio, SABADAZO es, aunque sea triste decirlo, la única alegría unánime de Cuba en sus días más convulsos. La carcajada más ardiente. El documento histórico más exacto del mal llamado “Período Especial” de los cubanos. La válvula de escape. La puerta de salida. La espera más querida. Diez Millones de personas esperando por la noche del sábado. El suceso televisivo más aplastante de la historia continental. Ningún país del mundo ha logrado jamás tener a todos sus habitantes amarrados a la misma hora y por el mismo canal.

El regreso de SABADAZO, esta vez, a los escenarios de Miami, salda una deuda con la nostalgia, y reconoce el nivel alcanzado por separado de cada uno de sus protagonistas. Juntos son el sistema de estrellas perfecto. Estos personajes los han hecho crecer como artistas. SABADAZO les convirtió en familia de todo el pueblo cubano. En cada hogar tienen sitio. Forman parte de ese santuario de los imprescindibles. Cuba ríe de un modo especial y secreto con ellos. El reencuentro será un acto de risa y de fe este 13 de Diciembre en el Miami Dade County Auditorium, donde los nombres de Carlos Otero, Gustavito, Margot, Matute, Bonco Quiñongo y Antolin El Pichón, volverán a resultar familiares, en la azotea más humorística del planeta.

Información y fotografía cortesía Glitter Promotions